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CHILE. El caso de Alejandra Arriaza como la primera mujer en dirigir el Servicio Nacional de Aduanas o de Guacolda Vargas como gerenta de Desarrollo y Sostenibilidad de Puertos Talcahuano son ejemplos actuales de mujeres que se abren camino en la alta dirección de servicios o empresas ligadas al rubro logística. Sin embargo, las estadísticas demuestran que falta mucho por avanzar en el camino por emparejar la cancha. Por un lado, las diferencias salariales; por otro, la participación desigual en cargos gerenciales o directivos.

Según el estudio ‘Mujeres en la Industria Marítima y Portuaria 2022’, realizado por la Cámara Marítima y Portuaria de Chile (Camport), la participación de las mujeres en la industria portuaria del país alcanzó el 40,8% de los cargos administrativos en 2021. Si se trata de la presencia de mujeres en el rubro portuario en general, solo representan el 12,6% de la dotación. En cuanto a mujeres que se capacitaron durante ese año para trabajar en el transporte marítimo chileno, la cifra llegó a 702.

El mismo informe demuestra una preocupación por parte de la industria para garantizar un ambiente adecuado y seguro a las mujeres, destacando que el 77% de las empresas cuenta con un protocolo de género ante situaciones de acoso laboral y/o discriminación.

Por otra parte, el ‘Estudio de Brechas de Género en la Industria Marítimo Portuaria de Chile’, desarrollado por la Universidad de los Andes en conjunto con la Universidad de Valparaíso, deja en evidencia una diferencia de remuneraciones de más del 10% entre hombres y mujeres. Es decir, las mujeres ganan 10% menos que los hombres en promedio. Otro hallazgo es que, en promedio, son ellas quienes suelen sacrificar mayormente su vida familiar.

Desde el gremio

Respecto al mismo estudio, Angélica Barría, directora de la Asociación de Profesionales en Logística (Aplog) y del Foro Iberoamericano de Logística, observa con atención que la brecha de género presente en el mercado es más significativa entre los grupos de mayor edad. ‘Esto quiere decir que la participación de mujeres de generaciones más antiguas es menor a la de las nuevas generaciones’, apunta.

Por otra parte, analiza, ‘la participación de las mujeres en puestos directivos, financieros y operativos está infrarrepresentada; en cambio, en los puestos de apoyo, como de administración o recursos humanos, está sobrerrepresentada (OCDE, 2021)’. Advierte que esta asignación tradicional de roles asociados con el género está influenciada por factores culturales y estereotipos de género, entre otros aspectos.

‘Al analizar el sector de transporte y almacenamiento, la representación de mujeres en las organizaciones pasó de un 25,8% en 2020 a un 25,7% en el 2021. En el mismo sector, la representación femenina en gerencias de primera línea también disminuyó, de 23,2% en 2020 a 22,6% en 2021, pero sí aumentó levemente la participación de mujeres en los directorios, de un 16,5% en 2020 a un 16,9% en 2021, según cifras entregadas en 2022 por el Ministerio de la Mujer y la Equidad de Género’, comenta la directora de Aplog.

Experiencias

Con más de 10 años de desarrollo profesional en el área de servicio al cliente en diversas industrias, Edith Tonioni llegó a la industria logística hace dos años, cuando se integró al equipo de Starken. Como subgerenta de Servicio al Cliente, tiene como rol principal velar por una atención rápida y eficaz: ‘Esto implica responder consultas, solicitudes y reclamos, tanto de personas que realizan envíos como de los que reciben las encomiendas; en ambos casos, se requiere información y soluciones oportunas’.

Tonioni dice que ‘ofrecer un servicio cercano y con una trazabilidad clara es clave en nuestro mercado, donde el papel del servicio al cliente es un diferenciador muy relevante’. Respecto a su gestión, confiesa que es prioritario generar un clima laboral de camaradería, para lo que se requiere un liderazgo empático y cercano.

‘Destaco que las mujeres somos más detallistas y empatizamos con nuestros clientes; nuestra capacidad para escuchar logra tender puentes que nos permiten generar cambios’, asegura.

Una profesional con larga trayectoria en la industria es Marcela Cabello. En los últimos 23 años se ha desempeñado en agencia de cargas, en las áreas de operaciones y ventas. Hoy ejerce como global network manager de Andes Integración Logística.

‘Estoy en la posición actual porque soy buena en lo que hago y no por ser mujer; veo lo mismo en las contrataciones, en las cuales se busca competencia técnica, experiencia y habilidades blandas para trabajar en equipo, y no si es hombre o mujer. Nuestra Gerencia General está liderada por una mujer, lo que nos hace sentir muy orgullosas’, cuenta Cabello.

Sin embargo, la profesional de Andes Integración Logística reconoce que en el rubro en general ‘aún existe brecha salarial, puesto que una mujer en la misma posición que un hombre tiene un salario menor’.

Acciones

La asociación gremial Aplog ha impulsado su iniciativa Winlog, cuya misión es visibilizar y conectar a mujeres profesionales del área logística en alianza con diversas organizaciones. ‘Es imprescindible fomentar el papel de la mujer en la sociedad empresarial, generar redes de contactos que faciliten la integración laboral y compartir experiencias entre las socias’, explica Angélica Barría.